Scratch es una iniciativa del MIT cuyo fin es enseñar a todo niño o persona interesada en programar a través de un entorno de aprendizaje adaptado para esta dinámica y totalmente gratuita, llevando la democratización de la red y del aprendizaje un paso más allá.
A pesar de que aún no se pone suficiente empeño en enseñar a los niños en las escuelas las nociones básicas de programación, en un mundo cada día más dependiente de la red y más globalizado, existen algunas iniciativas que pretenden solventar esta problemática convirtiendo el aprendizaje de programación en un juego para niños. Y en este caso, nunca una expresión había tenido tanto sentido, puesto que el MIT ha desarrollado un un entorno de aprendizaje de lenguaje de programación, bajo el nombre de Scratch, para que los niños o personas que no tiene conocimientos de programación puedan dar sus primeros pasos.
Aunque Scratch está diseñado especialmente para edades entre los 8 y 16 años, puede ser usado por personas de todas las edades, de hecho, ya son millones de personas las que están creando proyectos en Scratch en una amplia variedad de entornos, incluyendo hogares, escuelas, museos, bibliotecas y centros comunitarios, puesto que el MIT entrega a los educadores las herramientas necesarias para llevar a Scratch a sus comunidades y facilitar el aprendizaje de todo aquel que esté interesado en aprender a programar:
De forma totalmente gratuita a través de un portal web habilitado solo para este proyecto, con un lenguaje y una estética muy amigable para que le sea familiar a los niños y traducido totalmente al castellano, Scratch permite dar nuestros primeros pasos en la programación a través de ejercicios prácticos muy sencillos y muy visuales, de forma que todo lo que aprendamos del proyecto tenga un resultado tangible que podamos probar por nosotros mismos.
Lo más interesante del proyecto del MIT es que aparte de dar a los niños las herramientas necesarias para aprender un lenjuege de programación, que seguramente y conforme se hagan mayores costará más aprenderlo, permite a estos niños desarrollar de forma gratuita sus proyectos, como puede ser un pequeño juego o una pequeña animación, para permitirlos comprobar de primera mano que programar no es una tarea fatua si no que tiene un resultado y una recompensa directa.
Un proyecto muy interesante que permite llevar la democratización de internet y de la tecnología a todo aquel quiera empezar a desarrollar o empezar a programar, sin barreras de acceso y de forma totalmente gratuita. Un proyecto que desde luego, es muy interesante ver como evoluciona.