He escuchado desde pequeño a muchas personas decir que el dinero siempre busca al dinero. Que los pobres nos quedamos como estamos y los ricos cada día tienen más. Que la gente asalariada juega la lotería para no tener que laborar más, pero nunca tienen suerte; en cambio un individuo adinerado da en el clavo varias veces, aún sin necesitarlo. Todos y cada uno de esos comentarios podrían tener un punto lógico y real, pero lo cierto es que la riqueza depende del punto de vista en que la veas. Porque a decir verdad, el dinero no lo es todo, sino un complemento necesario.
Partiendo desde el tema específico del dinero, siempre he pensado que la gran diferencia entre ser rico y ser millonario es que a éste último podrían llegársele a acabar sus millones si no sabe utilizarlos. Tal es el caso de algunas celebridades en el género de la música anglosajona. Mientras que la persona rica, en cada minuto podría tener más porque ha puesto al dinero a trabajar para él y no él para el dinero. Y no hay que ser un experto para ser rico, sólo se requiere visión, pasión, inteligencia y un constante monitoreo del ambiente que nos rodea día a día.
A lo largo de mi trayectoria como educador, he tenido la grata experiencia de leer sobre la vida de famosos que actualmente dominan los encabezados de la revista Forbes, en cuanto a fortuna se refiere. Y cabe destacar que no todos han nacido en cuna de oro ni con un trébol de cuatro hojas incrustado en su nombre. Realmente han tenido que sudar la gota gorda, como dicen en el argot pueblerino, para estar donde están. Y en ese transcurso, algunos lo han llegado a perder todo y han tenido que comenzar desde cero. Increíble, pero cierto. Lo más sorprendente es que ese cantazo los ha convertido en empresarios mucho más exitosos de lo que eran antes.
Una persona de clase media o semi alta, puede estar trabajando 30 ó 40 años y jamás alcanzar a ganar ni 3 millones de dólares vitalicios. Suena un poco deprimente para muchos, pero los números son números y esa es la triste realidad. Y me refiero a sueldo bruto, antes de toda deducción, así que imagínese. Lo peor de todo es que ese individuo esperaba descansar al momento del retiro, pero un sinnúmero de enfermedades lo han visitado y devoran cada centavo que pudo guardar para ese momento. La mayoría de nosotros vive un panorama similar, pero yo les garantizo que podría ser diferente.
La clave está en el deseo, en la voluntad…en salir del molde de la vida, romper los esquemas y buscar estabilidad y libertad financiera a través de lo sepamos hacer. Si usted se considera el mejor, de seguro los demás lo verán de esa manera. Si usted ve más allá que otros, podría convertirse en los ojos del prójimo. Esa fue la estrategia del célebre y padre de la invención, Steve Jobs, que en paz descanse. De hecho, estoy totalmente convencido que algunos de ustedes están leyendo este artículo con uno de sus mayores inventos, el Iphone. Indiscutiblemente, este hombre, hizo al mundo mejor. Por eso le digo, no tenga miedo, arriésguese y formalice esa idea que tanto ha soñado. Olvídese de fracasar, y si sucediera, vuelva a levantarse. Son más los ricos que han caído que los que viven agarrados de la cima.
Por qué te amarras a un empleo que no te satisface, cuando tienes todo el potencial necesario para explotar en el éxito. Deja que tus ideas cobren vida, deja que tus pensamientos brillen como el oro. Lánzate de lleno al experimento y estarás sumamente orgulloso de cada uno de tus escalones trazados. Tal vez pensabas que encontrarías estrategias para volverte rico en este artículo, pero sencillamente, el dinero fácil de forma legal, no existe. Hay muchos tipos de inversión que te pueden catapultar al final de la montaña; y créeme que el tiempo es uno de ellos. Invierte tiempo en desarrollarte y educarte en esa visión que tienes, que probablemente tengas la virtud de verla florecer.
¿Por qué somos pobres y ellos son ricos? Porque ellos sí se atrevieron y asumieron el riesgo. Porque ellos no le temieron a la derrota. Porque ellos cayeron y volvieron a levantarse. Para ser rico en cuanto a dinero se refiere, no hay que ganar un sorteo ni dormir en la bolsa de valores. Sólo hay que enfocarse y trabajar duro, trabajar con pasión para materializar y convertir un pensamiento en una acción. Confía en ti mismo y verás que muchas cosas puedes lograr. Y recuerda, existen muchas otras cosas que nos hacen ricos, que no necesariamente envuelven dólares y centavos.