Utilizar los recursos informáticos un proveedor externo es lo que
ahora se conoce como la nube, Cloud en inglés. Pero por otro lado este
concepto siempre ha existido desde casi los comienzos del Internet, solo
que antes se llamaba Hosting. Hay diferencias sutiles entre Hosting y
Cloud, entendamos en este artículo cuáles son.
Hay una frase que dice "La nube no existe, es solo la computadora de
alguien más", y aunque cierto, no es del todo preciso. La nube va más
allá de usar la infraestructura de cómputo de alguien más, es ante todo,
el concepto de utilizar los "recursos" informáticos de un proveedor aun
costo generalmente muy bajo y en el cual tenemos completa accesibilidad
todo el tiempo y desde cualquier lugar, cualquier dispositivo.
Antes, en los viejos tiempos (10, 15 años atrás a lo más), requerías
digamos un servidor Web para el sitio de la empresa, entonces era
necesario comprar un equipo dedicado, instalarle un sistema operativo,
generalmente Linux, configurarlo, instalar seguridad, hacer pruebas,
montar el sitio Web, adquirir una IP pública homologada para que pudiera
ser visible en el Internet, adquirir el nombre de dominio, integrarlo y
configurarlo al servidor Web, la base de datos, pruebas y más pruebas,
etc. Sin dejar por un lado, la configuración de routers y switches. Y si
agregamos que pudiera tratarse de un sitio de mucho tráfico, entonces
agrega a la receta: servidores balanceadores de tráfico, muy
posiblemente separar la base de datos del servidor Web en si, en fin, un
montón de trabajo. Y claro, esto sigue sucediendo generalmente en el
ámbito de las empresas medianas y grandes.
Todo lo anterior además de consumir mucho tiempo y el gasto en si de
todos los recursos mencionados, además de los costos relacionados con
tarifas de uso de una IP exclusiva, dominio, etc. Y aunque obviamente
hoy en día hay que seguir inviertiendo, bajo concepto de la nube, todo
lo previo no solo se simplificó al extremo que literalmente en minutos
puedes tener un sitio Web trabajando, sino que los costos son
increíblemente reducidos. Lo que inviertes en un año, por ejemplo, en
un servicio de hosting
confiable, no tiene punto de comparación de lo que tendrías que gastar
bajo el antiguo esquema de trabajo arriba descrito. Lo que inviertes en
un año en un servicio de hosting representa un porcentaje bajísimo de
dinero de lo que hubieras invertido haciéndolo (y adquiriendo recursos)
tu mismo.
Los servicios en la nube, ya sean del tipo hosting o nubes
especializadas como Amazon, Azure, Oracle, etc. ofrecen en sus menúes de
opciones absolutamente todo: recursos de cómputo con amplia gama de
opciones, instalación de sistema operativo, configuración de servicios a
utilizar: web, bases de datos, balanceadores, aplicaciones de todo
tipo, etc., VPNs, redes virtuales, servicios de impresión, respaldos,
acceso a consola y un largo etcétera.
Incluso, lo común hoy en día, es que grandes empresas y gobierno
migren parte de sus plataformas a la nube. La madurez de la nube está en
su apogeo, seguridad, confiabilidad, rendimiento, disponibilidad,
accesibilidad son cuestiones que hay que tomar en cuenta al momento de
elegir un servicio de este tipo.
¿Cual es la diferencia entre un proveedor de hosting y un proveedor
cloud?
Tenemos estas dos grandes divisiones conceptuales. Un hosting proveé
recursos de cómputo, IP's dedicadas, bases de datos, etc. pero bajo un
esquema "shared" compartido. Es decir, los recursos que te asignan están
en uso junto con otros clientes, esta es la razón que suelen ser muy
económicos. Esto no quiere decir que sean inseguros. Tecnologías como
máquinas virtuales, contenedores, etc. entran en juego para aislar
completamente un cliente del otro, aunque físicamente compartan el mismo
equipo.
Un proveedor Cloud, por otro lado, está enfocado (casi todos) a
ofrecer recursos virtuales dedicados por cliente, completamente aislados
incluso a nivel de hardware entre un cliente y otro. En un servicio
cloud generalmente se contrata desde una sola máquina virtual dedicada a
un tipo de servidor específico que el cliente decide (base de datos,
servidor Web, FTP, etc.) y pueden escalar a literalmente miles de
equipos, con redes y subredes, routeadores, balanceadores, etc.
dedicados por completo a un solo cliente.
En un resumen muy simple podríamos decir que hosting es cuando deseas
tan solo hospedar un sitio web y cloud es cuando tienes requerimientos
de uno o varios equipos dedicados como si fueran servidores en tu site.
Ahora bien, decía que la diferencia es concpetual, porque en la
práctica los servicios de hosting ofrecen también servicios de cloud
completos y de servidores dedicados. Yo más bien diría que un buen
proveedor de hosting te ofrece desde algo tan simple como configurar tu
sitio Web llevándote de la mano y teniéndolo listo en unos minutos, o te
ofrece un panel de control visual donde no es nada dificil hacer
cambios, subir archivos, etc., y hasta ofrecerte lo mismo que los
grandes proveedores de cloud ofrecen. En Google Cloud por ejemplo, no
vas a encontrar una opción de crear un simple sitio web (opción común en
los hostings y que te guian paso a paso) a precios muy pero muy bajos
ya sea por mes o cuotas anuales, pero si vas a encontrar opciones para
crear una máquina virtual dedicada donde por tu cuenta instalas y
configuras un servidor Web donde hospedar tu sitio, pero sin un panel de
control.
La diferencia esta entonces en la capacidad de crecimiento o de
escalamiento del proveedor cloud y por supuesto los precios.
En fin, ya sea hosting o Cloud, quien se beneficia somos los usuarios finales con tanta competencia y diversidad de opciones.
Fuente: https://www.linuxtotal.com.mx
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