Mientras el mundo del desarrollo se obsesiona con frameworks modernos como React, Python y Rust, hay un lenguaje silencioso que sigue sosteniendo la infraestructura crítica de bancos, gobiernos y aseguradoras: COBOL. Con más de 60 años de historia, este lenguaje no solo está vivo, sino que es esencial para la economía global.
🏛️ Un legado que no se puede reemplazar fácilmente
COBOL fue creado en 1959 con un propósito claro: facilitar el desarrollo de aplicaciones comerciales legibles y portables. Desde entonces, ha sido adoptado por instituciones que manejan grandes volúmenes de transacciones, como bancos, compañías de seguros, aerolíneas y agencias gubernamentales.
Se estima que más del 80% de las transacciones financieras mundiales aún se procesan con sistemas basados en COBOL. Y no es por nostalgia: es por eficiencia, confiabilidad y estabilidad.
💸 Migrar cuesta millones (y puede fallar)
Reescribir un sistema COBOL que lleva décadas funcionando no es tarea menor. Implica:
- Riesgos operativos altísimos
- Costos millonarios
- Pérdida de conocimiento institucional
- Posibles errores en procesos críticos
Por eso, muchas empresas optan por modernizar e integrar COBOL con tecnologías actuales (como .NET, JVM o entornos cloud) en lugar de reemplazarlo por completo.
👨💼 Escasez de talento, pero alta demanda
Aunque menos del 30% de las universidades enseñan COBOL, la demanda de programadores especializados sigue creciendo. Durante la pandemia, varios estados de EE.UU. buscaron urgentemente expertos COBOL para mantener sus sistemas de beneficios.
En otras palabras: COBOL no está muriendo, está contratando.
🧠 ¿Lenguaje obsoleto? No tanto
COBOL fue diseñado para ser legible, estructurado y confiable. Y lo sigue siendo. Su sintaxis clara permite que los equipos de negocio y tecnología trabajen juntos sin fricciones. Además, su capacidad para manejar millones de transacciones por segundo lo hace ideal para sistemas bancarios y contables.
✈️ ¿Dónde se usa hoy?
Algunas organizaciones que aún dependen de COBOL:
- JP Morgan Chase, American Express: sistemas financieros
- IRS, Seguridad Social de EE.UU.: gestión tributaria y beneficios
- Verizon, AT&T: facturación y atención al cliente
- Delta Air Lines, Amtrak: reservas y logística
🧩 Conclusión: COBOL no es retro, es resiliente
La próxima vez que uses tu tarjeta de crédito, consultes tu saldo o reserves un vuelo, recordá: probablemente un sistema COBOL procesó tu transacción en milisegundos, con una confiabilidad que muchas apps modernas envidiarían.
COBOL no es un dinosaurio. Es el pilar invisible que mantiene funcionando el mundo digital de los negocios.
“No sé qué lenguajes habrá en el futuro, pero seguro que COBOL estará todavía allí”
- Bill Gates